
La terapia con testosterona está de moda ¿Es segura…y/o efectiva?

13/08/2025
I. Testosterona
1. Introducción
La testosterona es una hormona esteroidea fundamental para el desarrollo y mantenimiento de características sexuales masculinas, pero también cumple funciones importantes en la salud ósea, muscular, metabólica y mental en ambos sexos. Su producción está regulada por el eje hipotálamo hipófisis-gónada, y puede verse alterada por la edad, enfermedades crónicas o el uso de medicamentos.
2. Ejes principales de investigación
2.1 Testosterona y envejecimiento
Con la edad, los niveles de testosterona disminuyen gradualmente tanto en hombres como en mujeres, lo que puede causar fatiga, disminución de la libido, pérdida de masa muscular y alteraciones en el estado de ánimo.
Referencia:
Travison, T. G., Araujo, A. B., O'Donnell, A. B., Kupelian, V., & McKinlay, J. B. (2007). A population-level decline in serum testosterone levels in American men. The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, 92(1), 196–202. https://doi.org/10.1210/jc.20061375
2.2. Testosterona y salud cardiovascular
Los efectos de la testosterona en la salud cardiovascular siguen siendo objeto de debate. Algunos estudios han sugerido un aumento del riesgo de eventos cardiovasculares, mientras que otros indican un efecto protector en hombres con niveles bajos.
Durante años, si la terapia con testosterona aumentaba el riesgo de enfermedad cardiovascular fue una incógnita. A instancias de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), las compañías farmacéuticas que venden testosterona intentaron averiguarlo. Los investigadores reclutaron a aproximadamente 5200 hombres de mediana edad y mayores con hipogonadismo (que incluye niveles bajos de testosterona y síntomas como disminución de la libido, fatiga, menor erección o pérdida de vello corporal) que padecían enfermedad cardiovascular o un alto riesgo de padecerla. Los hombres fueron asignados aleatoriamente a usar un gel de testosterona o un gel placebo durante un promedio de casi dos años y se les dio seguimiento durante aproximadamente un año más.
“Los hallazgos principales son que, en los hombres tratados con dosis bajas o moderadas de terapia con testosterona, no se observan aumentos en ningún evento cardiovascular importante", afirma Anawalt. "Eso incluye accidentes cerebrovasculares, ataques cardíacos o muertes por enfermedad cardiovascular". Sin embargo, el estudio detectó eventos adversos (como ritmo cardíaco irregular, enfermedad renal aguda o coágulos en los vasos sanguíneos que alimentan los pulmones) que fueron raros, pero más comunes en los que tomaron testosterona que en los que tomaron placebo.
Referencias:
Vigen, R., O'Donnell, C. I., Barón, A. E., Grunwald, G. K., Maddox, T. M., Bradley, S. M., ... & Ho, P. M. (2013). Association of testosterone therapy with mortality, myocardial infarction, and stroke in men with low testosterone levels. JAMA, 310(17), 1829–1836. https://doi.org/10.1001/jama.2013.280386
Budoff, M. J., Ellenberg, S. S., Lewis, C. E., Mohler, E. R., Wenger, N. K., Bhasin, S., ... & Swerdloff, R. S. (2017). Testosterone treatment and coronary artery plaque volume in older men with low testosterone. JAMA, 317(7), 708–716. https://doi.org/10.1001/jama.2016.21043
2.3. Testosterona y cáncer de próstata
“No hay indicios de que la terapia con testosterona aumente el riesgo de cáncer de próstata”, afirma Anawalt. Pero hay una salvedad crucial. Ninguno de los estudios que han evaluado la terapia de reemplazo de testosterona duró más de unos pocos años. “Es un tiempo demasiado corto para establecer si existe algún efecto sobre el riesgo de cáncer de próstata”, señala Anawalt. “Es una enfermedad que se desarrolla a lo largo de muchos años”.
“De hecho, si se observara algo en el primer o segundo año, lo más probable es que estuviera desenmascarando un cáncer de próstata subyacente, en lugar de causarlo. Es decir, se le echa un poco de combustible al cáncer y se desencadena”.
“Lo único que está bastante claro es que cuando se somete a alguien a terapia de reemplazo de testosterona, lo que se aumenta es el riesgo de biopsias de próstata”. Esto se debe a que el PSA, el marcador que los médicos utilizan para alertarlos sobre un posible cáncer de próstata aumenta en la mayoría de los hombres que toman testosterona. "Pero creemos que se eleva al nivel que habrían tenido si hubieran tenido testosterona normal desde el principio", señala Anawalt.
2.4. Testosterona y apnea del sueño
Las apneas e hipopneas durante el sueño son más frecuentes en hombres que en mujeres. También se ha reportado un aumento de los trastornos respiratorios en hombres con hipogonadismo tras la administración de testosterona. Esto sugiere una influencia hormonal en el patrón respiratorio durante el sueño. Por lo tanto, un estudio revisó el ritmo respiratorio durante el sueño en 11 hombres con hipogonadismo, tanto con cómo sin terapia de reemplazo de testosterona. En cuatro sujetos, también se determinó la anatomía (tomografía computarizada) y la resistencia al flujo aéreo de la vía aérea superior en ambas ocasiones. La distribución y duración de las etapas del sueño se mantuvieron sin cambios tras la administración de andrógenos. Sin embargo, tanto las apneas como las hipopneas aumentaron significativamente durante el reemplazo de testosterona, de modo que el número total de eventos de trastornos respiratorios (apneas + hipopneas) por hora de sueño aumentó de 6,4 ± 2,1 a 15,4 ± 7,0 (p < 0,05). Este evento fue muy variable: algunos sujetos mostraron grandes aumentos en las apneas e hipopneas con el reemplazo de andrógenos, mientras que otros mostraron pocos cambios en la respiración durante el sueño. Por otro lado, las dimensiones de las vías respiratorias superiores no se vieron afectadas por la testosterona. Estos resultados sugieren que la testosterona contribuye a los trastornos respiratorios del sueño mediante mecanismos de cambios de patrones respiratorios más que a cambios anatómicos en las vías respiratorias superiores.
Referencia:
Matsumoto AM, Sandblom RE, Schoene RB, Lee KA, Giblin EC, Pierson DJ, Bremner WJ. Testosterone replacement in hypogonadal men: effects on obstructive sleep apnoea, respiratory drives, and sleep. Clin Endocrinol (Oxf). 1985 Jun;22(6):713-21. doi: 10.1111/j.1365-2265.1985.tb00161.x. PMID: 4017261.
2.5. Testosterona y salud mental
La testosterona ha sido asociada con la regulación del estado de ánimo, y niveles bajos pueden contribuir a síntomas depresivos o de ansiedad.
Referencia:
Zarrouf, F. A., Artz, S., Griffith, J., Sirbu, C., & Kommor, M. (2009). Testosterone and depression: Systematic review and meta-analysis. The Journal of Psychiatric Practice, 15(4), 289–305. https://doi.org/10.1097/01.pra.0000358315.88931.fc
2.6. Testosterona y rendimiento físico
La testosterona, especialmente en dosis suprafisiológicas, mejora significativamente la fuerza muscular, el tamaño del músculo y el rendimiento atlético, lo que explica su uso (y prohibición) en el dopaje deportivo.
Referencia:
Bhasin, S., Storer, T. W., Berman, N., Callegari, C., Clevenger, B., Phillips, J., ... & Casaburi, R. (1996). The effects of supraphysiologic doses of testosterone on muscle size and strength in normal men. New England Journal of Medicine, 335(1), 1–7. https://doi.org/10.1056/NEJM199607043350101
II. Testosterona en ELLOS
1. Introducción
La andropausia, también conocida como hipogonadismo masculino tardío o síndrome de deficiencia de testosterona relacionada con la edad, es un síndrome clínico caracterizado por una disminución progresiva de los niveles de testosterona en hombres “mayores”. Esta condición puede provocar síntomas físicos, sexuales y psicológicos que afectan la calidad de vida.
2. Fisiología de la testosterona y el envejecimiento
La testosterona es producida principalmente por las células de Leydig en los testículos bajo la regulación del eje hipotálamo-hipófisis-gónadas. Con el envejecimiento, se observa una disminución gradual de la secreción de testosterona, que puede llegar al 1-2% anual a partir de los 30 años.
Referencia:
Harman, S. M., Metter, E. J., Tobin, J. D., Pearson, J., & Blackman, M. R. (2001). Longitudinal effects of aging on serum total and free testosterone levels in healthy men. Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, 86(2), 724–731. https://doi.org/10.1210/jcem.86.2.7219
3. Características clínicas de la andropausia
Los síntomas más comunes incluyen:
- Disminución de la libido
- Disfunción eréctil
- Fatiga crónica
- Pérdida de masa muscular
- Osteopenia u osteoporosis
- Trastornos del sueño
- Depresión e irritabilidad
Estos síntomas no son específicos y pueden superponerse con otras patologías del envejecimiento, lo que dificulta su diagnóstico.
Referencia:
Wu, F. C., Tajar, A., Beynon, J. M., Pye, S. R., Silman, A. J., Finn, J. D., ... & Forti, G. (2010). Identification of late-onset hypogonadism in middle-aged and elderly men. New England Journal of Medicine, 363(2), 123–135. https://doi.org/10.1056/NEJMoa0911101
4. Diagnóstico de hipogonadismo tardío
El diagnóstico debe basarse en la combinación de síntomas clínicos y niveles bajos de testosterona total o libre, medidos en ayunas por la mañana. Se recomienda repetir la medición y excluir otras causas de hipogonadismo.
Referencia:
Bhasin, S., Brito, J. P., Cunningham, G. R., Hayes, F. J., Hodis, H. N., Matsumoto, A. M., ... & Yialamas, M. A. (2018). Testosterone therapy in men with hypogonadism: An Endocrine Society clinical practice guideline. The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, 103(5), 1715–1744. https://doi.org/10.1210/jc.2018-00229
5. Terapia de reemplazo con testosterona (TRT) en ELLOS
La TRT puede mejorar significativamente los síntomas en hombres con hipogonadismo confirmado. Las principales formas de administración incluyen geles, cremas, inyecciones intramusculares, parches y pellets.
Evidencias clínicas:
- Mejora de la función sexual, el estado de ánimo y la fuerza muscular.
- Aumento de la densidad ósea y la masa magra.
Riesgos y efectos secundarios
Los efectos adversos potenciales incluyen:
- Policitemia
- Hirsutismo
- Acné
- Apnea del sueño
- Supresión de la espermatogénesis
- Ginecomastia
- Aumento del riesgo cardiovascular (aún en estudio)
- Efectos sobre la próstata
Referencias:
Snyder, P. J., Bhasin, S., Cunningham, G. R., Matsumoto, A. M., Stephens-Shields, A. J., Cauley, J. A., ... & Ellenberg, S. S. (2016). Effects of testosterone treatment in older men. New England Journal of Medicine, 374(7), 611–624. https://doi.org/10.1056/NEJMoa1506119
Corona, G., Rastrelli, G., Di Pasquale, G., Sforza, A., Mannucci, E., & Maggi, M. (2018). Cardiovascular risk associated with testosterone-boosting medications: A systematic review and meta-analysis. Expert Opinion on Drug Safety, 17(3), 247–253. https://doi.org/10.1080/14740338.2018.1424832
6. Consideraciones éticas y clínicas
El tratamiento debe personalizarse cuidadosamente, priorizando la identificación de candidatos adecuados y el monitoreo regular (hematocrito, PSA, lípidos, función hepática y cardiovascular). No se recomienda la TRT en hombres con cáncer de próstata activo o antecedentes recientes de eventos cardiovasculares.
III. Testosterona en ELLAS
1. Introducción
Aunque comúnmente se asocia con los hombres, la testosterona también es una hormona esencial en el cuerpo femenino. En las mujeres, se produce principalmente en los ovarios, las glándulas suprarrenales y en pequeñas cantidades en los tejidos periféricos.
2. ¿Qué funciones cumple la testosterona en mujeres?
- Mantenimiento de la masa muscular y ósea
- Regulación del deseo sexual (libido)
- Influencia en el estado de ánimo y energía
- Producción de glóbulos rojos
- Función cognitiva (memoria, concentración)
3. Niveles normales
Los niveles normales de testosterona total en mujeres varían según la edad y el laboratorio, pero suelen encontrarse entre:
- 15 a 70 ng/dL (nanogramos por decilitro).
También puede medirse la testosterona libre, que representa la hormona activa no unida a proteínas.
4. Desequilibrios hormonales
4.1 Testosterona alta en mujeres:
Causas comunes incluyen:
- Síndrome de ovario poliquístico (SOP)
- Hiperplasia suprarrenal congénita
- Uso de esteroides anabólicos
- Tumores hormonales
Síntomas posibles:
- Aumento del vello corporal o facial (hirsutismo)
- Acné
- Irregularidades menstruales
- Voz más grave
- Aumento de masa muscular
- Caída de cabello tipo masculino
4.2 Testosterona baja en mujeres:
Causas posibles:
- Menopausia
- Insuficiencia ovárica
- Uso de anticonceptivos hormonales
- Estrés crónico o enfermedad prolongada
Síntomas:
- Fatiga
- Disminución de la libido
- Depresión o cambios de humor
- Pérdida de masa muscular
- Problemas de concentración y memoria
5. Terapias y tratamiento en ELLAS
En casos de niveles anormales, el tratamiento debe ser individualizado y siempre supervisado por un médico. Algunas opciones incluyen:
- Terapia de reemplazo hormonal (en casos de testosterona baja)
- Anticonceptivos hormonales o antiandrógenos (en casos de testosterona alta)
- Cambios en el estilo de vida, como dieta, ejercicio y manejo del estrés
6. Contraindicaciones
- Cáncer de mama o endometrio activo o antecedentes hormonodependientes
- Enfermedad hepática activa
- Hiperandrogenismo no diagnosticado
- Trastornos tromboembólicos sin tratamiento
V. Terapia con pellets de testosterona
1. Introducción
La terapia con testosterona en pellets subdérmicos está ganando popularidad como opción terapéutica en hombres y mujeres con deficiencia androgénica, particularmente durante la transición a la andropausia y a la menopáusica.
Estos implantes subcutáneos liberan testosterona de manera continua durante aproximadamente 3 a 6 meses dependiendo del metabolismo del paciente y la dosis implantada, sin picos séricos marcados, lo que mejora la estabilidad hormonal y la adherencia terapéutica.
Ventajas: Niveles hormonales más estables, menor frecuencia de aplicación.
Desventajas: Procedimiento invasivo menor, riesgo de extrusión del pellet o infección local.
2. Características de los pellets de testosterona:
- Composición: Generalmente contienen testosterona cristalina pura comprimida (BIOIDENTICA)
- Vía de administración: Implante subcutáneo (normalmente en la región glútea).
- Lugar de inserción: Región superior externa del glúteo o flanco abdominal. Se realiza con anestesia local (lidocaína). Se hace una pequeña incisión (0.5–1 cm). Se inserta un trócar o cánula para colocar los pellets en el tejido subcutáneo. Se cierra con tiras adhesivas o puntos de sutura absorbibles. Tiempo del procedimiento: Aproximadamente 10–15 minutos. Recomendaciones post-procedimiento: Evitar ejercicios intensos por 3–5 días.
3. Efectos secundarios más frecuentes
Locales: Dolor, hematoma, infección, extrusión del pellet (1–5%).
4. Aspectos clínicos
4.1 Dosis comúnmente utilizadas
Las dosis varían según los niveles basales de testosterona, edad, peso y metabolismo del paciente:
- Pellets comunes: Cada uno contiene entre 75 mg , 100 mg y 200 mg de testosterona.
- Dosis típica en el hombre con déficit de testosterona: Se implantan de 600 a 1200 mg por sesión, lo que equivale a 6 a 12 pellets, generalmente cada 3 a 6 meses.
Aunque la FDA en EE. UU. no ha aprobado formulaciones de testosterona específicamente para mujeres, diversas guías internacionales y evidencia emergente respaldan su uso en los siguientes contextos:
- Trastorno del deseo sexual hipoactivo (TDSH) confirmado
- Deficiencia androgénica postmenopáusica sintomática
- Menopausia quirúrgica
- Casos seleccionados de terapia hormonal combinada (estrógenos + testosterona)
Es esencial realizar una evaluación integral: historia clínica, examen físico, perfil hormonal basal (testosterona total y libre, SHBG, estradiol, FSH), y evaluar comorbilidades.
No existe una dosis típica de testosterona en la mujer ya que su uso depende mucho del déficit encontrado y la calidad de vida, usualmente se habla de una dosis que va desde 2 a 2.6 x kg de peso. Existen también dosis supra fisiológicas que se usa en casos de fibromialgia y migraña, por ejemplo.
5. Efectos secundarios y manejo
La mayoría son dosis-dependientes y reversibles:
- Acné, seborrea
- Hirsutismo leve
- Cambios en la voz (raros, usualmente con dosis elevadas)
- Alteraciones menstruales en mujeres perimenopáusicas
- Eritrocitosis (rara en mujeres)
Es crucial el monitoreo regular, al menos cada 3-6 meses:
- Revisión de síntomas
- Testosterona total y libre
- Hematocrito
- Perfil hepático y lipídico
6. Consideraciones éticas y legales
Dado que muchas formulaciones no están aprobadas específicamente para mujeres, se considera un uso fuera de etiqueta (off-label). Es esencial documentar el consentimiento informado, discutir riesgos/beneficios, y realizar seguimiento estricto.
VI. CONCLUSIONES GENERALES
La testosterona tiene funciones esenciales en la salud masculina y femenina. Su disminución puede afectar significativamente la calidad de vida. La investigación científica continúa profundizando en sus beneficios terapéuticos y riesgos, especialmente en el contexto del envejecimiento y la medicina de precisión. La TRT puede ser beneficiosa bajo indicaciones clínicas claras y con monitoreo adecuado.
La andropausia es una condición clínica relevante en el envejecimiento masculino. El diagnóstico adecuado y el tratamiento con testosterona pueden mejorar significativamente la calidad de vida, aunque deben sopesarse cuidadosamente los beneficios y riesgos. La investigación continúa evaluando la seguridad a largo plazo de la TRT.
La testosterona es una hormona clave para la salud femenina. Tanto los niveles altos como bajos pueden afectar el bienestar físico, emocional y sexual de la mujer. Es importante consultar con un especialista en endocrinología o ginecología.
La testosterona en pellets representa una opción terapéutica útil tanto para hombres como mujeres seleccionadas con deficiencia androgénica sintomática. Su aplicación debe estar basada en criterios clínicos claros, dentro de un marco ético, con seguimiento estricto y dosificación personalizada. La formación y actualización continua del profesional es clave para su prescripción responsable.
Referencias:
- Bhasin, S., Brito, J. P., Cunningham, G. R., Hayes, F. J., Hodis, H. N., Matsumoto, A. M., ... & Yialamas, M. A. (2018). Testosterone therapy in men with hypogonadism: An Endocrine Society clinical practice guideline. The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, 103(5), 1715–1744. https://doi.org/10.1210/jc.2018-00229
- Corona, G., Rastrelli, G., Di Pasquale, G., Sforza, A., Mannucci, E., & Maggi, M. (2018). Cardiovascular risk associated with testosterone-boosting medications: A systematic review and meta-analysis. Expert Opinion on Drug Safety, 17(3), 247–253. https://doi.org/10.1080/14740338.2018.1424832
- Harman, S. M., Metter, E. J., Tobin, J. D., Pearson, J., & Blackman, M. R. (2001). Longitudinal effects of aging on serum total and free testosterone levels in healthy men. Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, 86(2), 724731. https://doi.org/10.1210/jcem.86.2.7219
- Snyder, P. J., Bhasin, S., Cunningham, G. R., Matsumoto, A. M., StephensShields, A. J., Cauley, J. A., ... & Ellenberg, S. S. (2016). Effects of testosterone treatment in older men. New England Journal of Medicine, 374(7), 611–624. https://doi.org/10.1056/NEJMoa1506119
- Wu, F. C., Tajar, A., Beynon, J. M., Pye, S. R., Silman, A. J., Finn, J. D., ... & Forti, G. (2010). Identification of late-onset hypogonadism in middle-aged and elderly men. New England Journal of Medicine, 363(2), 123–135. https://doi.org/10.1056/NEJMoa0911101
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